Derecho a la desconexión laboral para la optimización de procesos
Fomentar el derecho a la desconexión laboral permite invertir en un futuro más saludable, equilibrado y productivo.
min
En cualquier momento de un día laborable, en cualquier lugar del mundo, los trabajadores disfrutan del derecho a la desconexión. Esto incluye gran parte de las Américas, muchos países de la UE e incluso países atípicos como Kenia y Kazajistán, que han tomado medidas en los últimos 10 años para dar a sus trabajadores el derecho a desconectarse después de las horas propiamente laborales.
Sin embargo, la primera y la segunda economía más grande del mundo, Estados Unidos y China, no han seguido el mismo ejemplo, aunque un proyecto de ley de "libertad de desconectarse" se encuentra actualmente ante la asamblea legislativa del estado de California y muchas empresas estadounidenses tienen sus propias políticas para los empleados.
¿Dónde se implementa el derecho a la desconexión?
Según Dentons, otros gobiernos que han introducido medidas legales relacionadas con el derecho a la desconexión laboral incluyen:
- Argentina
- Bélgica
- Chile
- Colombia
- Chipre
- Francia
- Grecia
- Italia
- Kazajistán
- Luxemburgo
- México
- Ontario, Canadá
- Portugal
- República Eslovaca
- España
- Ucrania
Entre los gobiernos que introdujeron medidas políticas se incluyen Irlanda y Filipinas, según informa Dentons.
¿Por qué es necesaria la desconexión?
Algunas voces expertas coinciden en que el derecho a la desconexión marcará una diferencia para los empleados a quienes no se les paga por estar disponibles y que donan muchas horas no remuneradas a su lugar de trabajo.
Este cambio ayudará a los trabajadores a proteger su salud mental y mejorar el equilibrio entre el trabajo y la vida personal. Ayudará especialmente a quienes tienen empleos inseguros y necesitan ese respaldo legislativo.
Una investigación realizada en 2023 descubrió que los empleados remotos que eran contactados por sus empleadores fuera del horario laboral experimentaban niveles adicionales de estrés y estados de ánimo depresivos.
La desconexión laboral es esencial por varias razones, tanto para el bienestar de los empleados como para la eficiencia y sostenibilidad de las organizaciones.
Prevención del agotamiento y el estrés laboral (burnout)
El agotamiento es uno de los efectos más perjudiciales de la sobrecarga de trabajo y la falta de límites entre la vida personal y profesional. Si los empleados están constantemente disponibles, revisando correos electrónicos, respondiendo mensajes o trabajando fuera de horario, pueden sentirse agotados física y emocionalmente.
La desconexión ayuda a reducir estos niveles de estrés, permitiendo que las personas se recarguen y estén listas para rendir de manera efectiva en su jornada laboral.
2. Mejora del bienestar mental y emocional
La desconexión tiene un impacto directo en la salud mental de los trabajadores. La constante presión de estar disponible 24/7 puede aumentar la ansiedad, la sensación de estar abrumado y la falta de satisfacción con la vida personal.
Cuando los empleados tienen tiempo para desconectar completamente de las responsabilidades laborales, pueden dedicar tiempo a actividades que fomenten su bienestar, como pasar tiempo con la familia, practicar hobbies o simplemente descansar, lo que reduce el riesgo de trastornos emocionales.
3. Fomento del equilibrio entre la vida personal y profesional
En un mundo cada vez más digitalizado, las fronteras entre el trabajo y la vida personal se desdibujan fácilmente, especialmente cuando se trabaja desde casa o en modalidad remota.
La desconexión permite a los empleados establecer límites saludables, lo que mejora su capacidad para disfrutar de su tiempo libre y de calidad, sin sentir que están "trabajando" en su tiempo personal. Esto también promueve relaciones interpersonales más saludables y una vida familiar más equilibrada.
4. Aumento de la productividad a largo plazo
Aunque pueda parecer que trabajar más horas o estar siempre disponible aumentaría la productividad, en realidad, la falta de descanso tiene efectos negativos.
Los estudios sobre bienestar laboral han demostrado que las personas que descansan adecuadamente y desconectan regularmente de sus tareas laborales tienen un mejor desempeño, son más creativas, toman decisiones más efectivas y tienen una mayor capacidad de concentración cuando regresan al trabajo.
El derecho a la desconexión asegura que los empleados mantengan niveles de energía más altos y su motivación se mantenga.
5. Reducción del absentismo y la rotación de personal
El exceso de trabajo y la falta de desconexión están directamente relacionados con el agotamiento y el absentismo. Los empleados que no pueden desconectar de manera efectiva tienden a experimentar mayores tasas de estrés, lo que puede llevar a ausencias por enfermedad o, en los casos más extremos, a abandonar la empresa debido a la fatiga crónica. Ofrecer la posibilidad de desconectar puede reducir estos problemas y, a su vez, mejorar la retención de talento.
6. Fomentar la vena creativa e innovadora
El descanso y el tiempo libre no son solo para "recuperarse"; también son cruciales para la creatividad. El trabajo continuo y la sobrecarga de información pueden agotar la capacidad creativa de las personas.
Sin embargo, al desconectar, los empleados tienen espacio mental para reflexionar, relajarse y dejar que sus ideas fluyan de manera más natural. Esto fomenta la innovación y la capacidad de abordar los problemas desde nuevas perspectivas.
7. Impulsar el compromiso y la satisfacción laboral
Cuando los empleados sienten que su tiempo personal es respetado y que pueden acogerse al derecho a la desconexión laboral, se mejora su satisfacción en el desempeño.
Esta situación se traduce en mayor compromiso con la organización, una actitud positiva hacia el trabajo y una mayor disposición para contribuir al éxito de la empresa. Las organizaciones que promueven la desconexión laboral, además, se perciben como más humanas y preocupadas por el bienestar de sus equipos.
8. Cumplimiento de la legislación y derechos laborales
En muchos países, los derechos de los empleados a desconectarse están siendo reconocidos y regulados por la ley, como es el caso en Francia, España y otros países europeos.
Estas actuaciones implican que las empresas tienen la responsabilidad de asegurar que sus empleados puedan disfrutar de su tiempo libre sin la presión de estar disponibles. Respetar estos derechos es vital para evitar conflictos legales y promover una cultura de trabajo justa y respetuosa.
Cómo ser eficaz con las nuevas políticas
En Irlanda, un estudio de 2022 del University College de Dublín concluyó que la sola presencia del “derecho” era insuficiente y que las leyes y políticas debían combinarse con concienciación, medidas de implementación efectivas, monitoreo y revisión conjuntos continuos por parte de la gerencia y los representantes de los empleados, así como medidas para abordar las causas de la sobreconexión.
Los empleadores implementaron las siguientes acciones para garantizar la implementación del derecho a la desconexión laboral:
- Concientizar sobre el derecho en sí
- Proporcionar capacitación a los gerentes tanto sobre el riesgo de la conexión constante como sobre los beneficios de desconectarse del trabajo.
- Establecer un corredor de correo electrónico/comunicación fuera del cual los trabajadores no estén obligados a responder mensajes.
- Proporcionar capacitación a los empleados sobre los riesgos de la conexión constante y los beneficios de desconectarse del trabajo.
El derecho a la desconexión laboral no solo es necesario para preservar la salud y el bienestar de los empleados, sino también para garantizar que las organizaciones operen de manera más eficiente y sostenible. Sin tiempo para descansar y reponer energías, tanto los empleados como las empresas corren el riesgo de agotarse, lo que a largo plazo puede tener un impacto negativo en la productividad, la innovación, y la satisfacción general. Fomentar el derecho a desconectarse es invertir en un futuro más saludable, equilibrado y productivo.