Cómo aprovechar los beneficios en salud mental
La salud mental es una amenaza para el bienestar individual y una carga económica que erosiona la productividad, la moral y la cultura general de la fuerza laboral.
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La salud mental es una amenaza para el bienestar individual y una carga económica que erosiona la productividad, la moral y la cultura general de la fuerza laboral.
Un estudio conjunto del Foro Económico Mundial y la Escuela de Salud Pública de Harvard pronostica un asombroso gasto global de 6 billones de dólares en afecciones de salud mental y sus consecuencias relacionadas para 2030, en comparación con 2,5 billones de dólares en 2010.
En este contexto, sólo la depresión extrae 210 mil millones de dólares al año de la economía estadounidense, y los empleadores soportan la mitad de esta carga financiera. En respuesta a la creciente prevalencia de problemas de salud mental, el bienestar en el lugar de trabajo se ha convertido en un punto central.
El mercado mundial del bienestar corporativo en 2022 ascendía a 55,5 millones de dólares. Sin embargo, para 2031, se prevé que este mercado crezca hasta los 94,6 millones de dólares. Sin embargo, a pesar de la afluencia de recursos destinados a este problema, un sentimiento creciente cuestiona la eficacia de estas iniciativas.
Una investigación reciente publicada en el Industrial Relations Journal solo ha arrojado más dudas sobre la eficacia de los programas de bienestar en el lugar de trabajo para mejorar los resultados de salud mental.
Lo que encontró el estudio
Este estudio de la Universidad de Oxford de más de 46.000 empleados británicos en más de 200 empresas, dirigido por el investigador William Fleming, encontró que las personas que participan en programas de bienestar centrados en mejorar la salud mental no obtuvieron ningún beneficio en comparación con los empleados que no lo hacen.
Los programas e intervenciones de bienestar incluyeron entrenamiento de resiliencia, aplicaciones de atención plena y otras aplicaciones de bienestar que promueven hábitos de sueño saludables, entre otros comportamientos. Irónicamente, el único programa que parecía mejorar la salud mental fue el voluntariado. Incluso con esto, Fleming advierte que "los efectos estimados son pequeños, probablemente sesgados en la selección, y estas iniciativas no abordarían las demandas laborales y los recursos centrales para la comprensión teórica y empírica del bienestar laboral".
Si bien este estudio puede hacer sonar algunas alarmas, no todo es en vano. Los programas de bienestar en el lugar de trabajo pueden tener un efecto positivo neto en general. Sin embargo, este estudio consolida aún más un principio esencial necesario para aprovechar al máximo las iniciativas de salud mental en el lugar de trabajo.
La secuenciación importa
Ya sea conquistar un maratón o convertir una empresa incipiente en una empresa próspera, ambos actos requieren una secuencia deliberada de pasos para obtener los resultados deseados. El reciente estudio de la Universidad de Oxford nos recuerda la importancia crítica de la secuenciación en lo que respecta al diseño de un programa de bienestar mental eficaz y una cultura general eficaz. Este estudio sirve como recordatorio de que se deben establecer y nutrir unas bases sólidas antes de abordar los detalles más finos.
Si bien las aplicaciones de salud mental, las clases de yoga, los sillones de masaje, las membresías en gimnasios y los talleres de nutrición ofrecen sin duda beneficios, no pueden compensar ni encubrir una deficiencia fundamental en la cultura, el liderazgo y la infraestructura del lugar de trabajo.
Ninguna aplicación de bienestar ni charla motivacional puede remediar un ambiente de trabajo tóxico, la falta de oportunidades de desarrollo profesional, una compensación inadecuada, una autonomía personal limitada y una desconexión con la misión y el propósito de la organización.
Así como un corredor de maratón no intentaría una carrera sin una base adecuada, las empresas deben abordar las cuestiones fundamentales, antes que nada. Esto no niega el valor de diversas iniciativas de bienestar. Más bien, simplemente enfatiza la importancia de la secuenciación estratégica. Construyamos una cultura organizacional resiliente y de apoyo que apoye el bienestar de los empleados en su esencia, y luego agreguemos con precisión varios aditivos de bienestar que complementen y amplifiquen nuestra misión, asegurando así la alineación organizacional.
El negocio ha cambiado
El panorama empresarial ha cambiado radicalmente debido a los rápidos avances tecnológicos, eventos globales sin precedentes y normas y valores sociales cambiantes. Utilizar el salario para atraer y retener a los mejores talentos ya no es adecuado, ya que un estudio de Glassdoor de 2019 encontró que más de la mitad de los 5.000 participantes consideraban que la cultura era más importante que el salario en lo que respecta a la satisfacción laboral.
Tanto el estudio Glassdoor como el de Oxford se produjeron en épocas prepandémicas y ambos sirven como recordatorio de que el enfoque del bienestar en el lugar de trabajo debe evolucionar para adaptarse a los tiempos actuales. En el panorama actual, los empleados priorizan algo más que la compensación financiera: buscan un sentido de pertenencia, autonomía, propósito y realización. Como era de esperar, esos ingredientes mejoran la salud mental de una persona cuando se cuidan y se respetan.