Cómo implementar programas de salud mental positivos en el lugar de trabajo

A pesar de la mayor cobertura de los medios, todavía existe un estigma asociado con la salud mental.
25/01/2023

A pesar de la mayor cobertura de los medios, todavía existe un estigma asociado con la salud mental. Necesitamos eliminar o reducir ese estigma. No hay respuestas fáciles ni soluciones seguras. Sin embargo, al crear espacio y tiempo para hablar sobre el bienestar, podemos asegurarnos de que somos capaces de apoyar a quienes sufren con su bienestar mental y mejorar nuestra propia resiliencia.

 

La salud mental en el lugar de trabajo

 

La gestión de personas requiere una variedad de habilidades. Necesitamos navegar por la productividad, el desarrollo personal y el bienestar personal de nuestra plantilla. Cuando pensamos en el bienestar mental de las personas que administramos, puede haber varias cosas en las que debemos pensar.

 

Pero ¿cómo podemos, como gerentes, mejorar el bienestar de los empleados en el entorno laboral? Dependerá de la naturaleza específica de nuestro equipo y de los desafíos a los que se enfrentan.

 

Una cosa clave es permanecer atentos a los signos de estrés de los trabajadores. Algunas personas se consuelan al comer, otras socializan, otras hablan mucho, otras se callan. Cuanto más consciente sea nuestro equipo y hablemos acerca de sus signos de estrés individuales, más podrán notarlos personalmente y más podremos apoyarlos como grupo.

 

Por ejemplo, puede ser que una persona hable mucho cuando está estresada y pueda perturbar al equipo. Un enfoque aquí podría ser probar diferentes conversaciones en diferentes ubicaciones. Esto apoyará la necesidad de hablar de esa persona, sin interrumpir al resto del equipo.

 

Planes de acción de bienestar

 

Las organizaciones bien formadas en la materia invierten en programas de salud mental positivos. Muchos de ellos han comenzado a trabajar con el personal para desarrollar planes de acción de bienestar individuales. Dicho plan tiene ocho elementos clave. 

 

Para idear un plan de salud mental específico para cada caso es necesario que cada empleado reflexione sobre cada una de estas ocho preguntas y piense en la respuesta. En otras palabras, ¿qué puede hacer cada trabajador para ayudarse a sí mismo?

 

  1. ¿Qué le ayuda a mantenerse mentalmente sano en el trabajo?
  2. ¿Qué puede hacer su gerente para ayudarlo a mantenerse mentalmente saludable en el trabajo?
  3. ¿Existe alguna situación que pueda provocarle una mala salud mental?
  4. ¿Cómo podría afectar el estrés o la mala salud mental en su trabajo?
  5. ¿Cuáles son las primeras señales de advertencia que otros podrían notar?
  6. ¿Qué apoyo se podría poner en marcha para minimizar los factores desencadenantes o para apoyarlo?
  7. Si se notan las señales de advertencia, ¿qué debemos hacer?
  8. ¿Existen preferencias laborales que los demás deben conocer?

 

Con los equipos, a menudo, puede ser mejor comenzar de manera simple y hacer crecer su plan de equipo de bienestar. El plan no es legalmente vinculante, sino más bien un acuerdo entre nosotros y los miembros de nuestro equipo. También podemos incluir los ajustes que puedan necesitar para respaldarlos en la detección de posibles problemas de salud mental en el trabajo.

 

Alguna cosa simple que podemos hacer es organizar un almuerzo de equipo regular, tal vez después del día de pago. En caso de que el equipo todavía está trabajando de forma remota, podemos organizar un desayuno en Zoom. Simplemente se trata de crear un espacio de reunión relajado donde descubramos cómo están los demás. Si lo deseamos, podemos agregar un elemento de 'conciencia de bienestar', como los mejores alimentos para comenzar el día o qué comer para reactivar la energía de la tarde.

 

Si deseamos ser más ambicioso, podemos organizar caminatas para el almuerzo. ¿Salir de la oficina? ¿Podríamos ponernos al día con nuestro jefe de equipo mientras damos un paseo? Sí, por qué no, caminar es una excelente manera de relajar la conversación.

 

Lo que siempre debemos recordar: solo porque las personas se vean bien, no significa que se sientan bien en el trabajo. Seamos compasivos y tratemos de no hacer suposiciones, sobre todo con lo que concierne a la salud mental de los trabajadores.

 

Existen muchos enfoques para cuidar no solo nuestro propio bienestar mental, sino también el de nuestro equipo y colegas. Hemos explorado un par de puntos de partida para mejorar nuestra salud mental y la de nuestro equipo. El mensaje clave aquí es que, dondequiera que comencemos, será el mejor punto de partida. Probemos algo diferente, revisémoslo, modifiquémoslo, hagamos que la gente lo acepte y luego convirtámoslo en un hábito.