Equidad de género en el mercado laboral

A medida que las políticas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) reciben una mayor atención y escrutinio, estudios recientes han mostrado una forma efectiva de aumentar la equidad de género y, en consecuencia, la representación femenina en el entorno laboral sin dar preferencia a las mujeres por encima de los hombres.

De acuerdo con Indermit Gill, Economista jefe del Banco Mundial, "las mujeres tienen la capacidad de revivir la frágil economía global". Sin embargo, esto solo será posible si se acelera la implementación de las reformas políticas y otras medidas necesarias para superar los numerosos obstáculos que limitan su avance, destacó Gill durante la presentación del informe Mujeres, Empresas y la Ley 2024 a principios de este año.

Datos sobre la equidad de género

La participación activa de las mujeres en el ámbito laboral es beneficiosa para todos. Reducir las disparidades de género en áreas como el empleo y el emprendimiento podría incrementar el producto bruto interno global en un 20%, según los cálculos del Banco Mundial.

Aunque aún queda mucho por hacer, al ritmo actual, se estima que se necesitarían hasta cinco generaciones, o 134 años, para lograr la equidad de género a nivel mundial, según el Informe Global sobre la Brecha de Género 2024 del Foro Económico Mundial, ya se perciben signos de recuperación económica postpandemia, especialmente en los mercados laborales. Este avance es crucial para caminar hacia la equidad de género, un factor clave para el desarrollo global.

La incidencia femenina en el mercado laboral del casi centenar de estados analizados por la investigación de los últimos dieciocho años superó los niveles del pasado año. Las cifras se mueven del 63,5% hasta casi el 68%. La fisura en oportunidades económicas se reduce en diecisiete años.

Pero ¿cómo repercute esto en las mujeres? ¿Dónde se encuentran las diferencias más acusadas y cómo se puede actuar para eliminarlas?

Liderazgo y participación laboral: un camino hacia la equidad de género

Aunque las tasas de desempleo global han regresado a los niveles previos a la pandemia, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) anticipa un aumento en estos números este año debido a factores como la caída de la productividad, el crecimiento de las desigualdades entre países ricos y pobres, y otros elementos económicos.

Las mujeres constituyen el 42% de la fuerza laboral global, pero representan solo el 31,7% de los puestos de liderazgo, una clara diferencia en comparación con sus colegas masculinos en casi todas las industrias y economías, según un informe de LinkedIn citado por el Foro Económico Mundial. A pesar de que las mujeres alcanzan el 50% de los empleos en niveles de entrada, su acceso a los cargos ejecutivos sigue siendo limitado, con solo el 25% de los puestos de alta dirección ocupados por ellas.

Este panorama subraya la necesidad urgente de promover la equidad de género en todos los niveles del mercado laboral, especialmente en las posiciones de liderazgo, para asegurar una representación más justa y balanceada.

Transformación de la fuerza laboral y oportunidades para la equidad de género

En medio de una desaceleración económica global, el mercado laboral está atravesando una transformación impulsada por avances tecnológicos, como la inteligencia artificial generativa (GenAI), que está cambiando drásticamente la manera en que realizamos nuestras tareas diarias. De hecho, tres de cada cuatro trabajadores de oficina ya están utilizando estas herramientas en sus funciones.

Sin embargo, los expertos opinan que la incorporación de nuevas tecnologías puede ser beneficiosa para las mujeres. Según LinkedIn, las mujeres poseen un 28% más de habilidades interpersonales esenciales para los empleos del futuro, tales como liderazgo estratégico y trabajo en equipo. Combinado con el creciente número de mujeres capacitadas en inteligencia artificial, la llegada de la GenAI podría ser una excelente oportunidad para disminuir la brecha de género en el sector tecnológico.

El porcentaje de mujeres en puestos de liderazgo es un indicador clave de la equidad de género en el mercado laboral. No obstante, el Informe sobre la Brecha de Género en el Mundo 2024 señala que, en medio de un contexto económico desafiante, la presencia femenina en altos cargos sigue siendo insuficiente, lo que refleja una realidad de desigualdad en la representación de las mujeres en el ámbito laboral.

Avances y desafíos de las mujeres en sectores específicos

¿De qué manera están las mujeres en sectores clave de la economía? Aunque la representación femenina en campos STEM ha aumentado desde 2016, las mujeres aún constituyen solo el 28,2% de la fuerza laboral en estas áreas. Un informe destaca que, en particular, la "caída en la cima" (drop to de top) es más evidente en este sector, ya que las posiciones de alto nivel son más difíciles de alcanzar que en profesiones no STEM.

En el campo de la inteligencia artificial (IA), las mujeres están logrando avances significativos, a medida que esta tecnología se convierte en una herramienta crucial para la transformación digital en las empresas. Según datos recientes de LinkedIn, el número de mujeres en ingeniería de IA se ha duplicado desde 2016. A pesar de seguir siendo una minoría comparado con sus homólogos masculinos, la presencia femenina en sectores como tecnología, medios de comunicación y servicios profesionales está aumentando. La paridad de género también ha mostrado señales de mejora en la IA dentro de sectores como la educación, la manufactura y la tecnología.

La capacitación sigue siendo esencial para todos los profesionales, pero el informe señala que las diferencias de género en el acceso a oportunidades educativas sesgan la manera en que hombres y mujeres participan en la transición tecnológica, lo que a su vez influye en sus perspectivas laborales futuras.

Según los datos de Coursera, las mujeres han alcanzado paridad en áreas como colaboración, liderazgo, mentoría y empatía en cursos online. Sin embargo, la representación femenina en campos clave como la inteligencia artificial, big data, programación y ciberseguridad sigue siendo limitada, con tasas de participación de solo un 30% en IA, un 31% en programación y un 31% en redes y ciberseguridad. Estas brechas en la capacitación técnica son un desafío para lograr una mayor equidad de género en la fuerza laboral, especialmente en las industrias más demandadas y en crecimiento.

Cómo lograr la equidad de género: desafíos y oportunidades

El informe subraya que los últimos años han estado marcados por desafíos geopolíticos y macroeconómicos, además de crisis sociales y la caída de las infraestructuras de apoyo. Todo esto ha contribuido a que los avances hacia la equidad de género se vean frenados, con las desigualdades persistiendo en diversos sectores de la sociedad.
Para alcanzar un desarrollo verdaderamente inclusivo y sostenible, los autores del informe insisten en que la paridad de género es esencial. Esta constituye una oportunidad clave para que tanto gobiernos como empresas trabajen juntos en mejorar la vida de las mujeres y niñas, lo que a su vez beneficiará a la economía global y fortalecerá a la sociedad en su conjunto.

En este contexto, el Proyecto Global de Paridad de Género 2030 busca impulsar una igualdad económica real, actuando sobre diversos frentes. Esta iniciativa de seis años tiene como objetivo transformar los mercados laborales, modernizar los sistemas industriales y garantizar que la igualdad de género esté integrada en los cambios globales que afectan áreas cruciales como la tecnología, el cambio climático y los sistemas de cuidados.

Además, el informe resalta la importancia de medidas como las cuotas de género y las redes profesionales para mejorar el acceso de las mujeres al empleo. Según datos de LinkedIn, los hombres suelen tener redes más amplias y consolidada, lo que les da ventajas en su desarrollo profesional. Sin embargo, se ha observado que las conexiones más débiles de las mujeres también pueden llevar a mejores resultados en su carrera.

Otro obstáculo importante que enfrentan las mujeres es el creciente número de responsabilidades como cuidadoras, lo que limita su capacidad para participar plenamente en el mercado laboral. Es fundamental, por lo tanto, contar con sistemas de cuidados y licencias parentales que fomenten la equidad de género. Estudios del Banco Mundial han demostrado que cuando se aumentan las bajas por paternidad, las mujeres tienden a participar más activamente en la fuerza laboral.

Aunque el progreso actual en la consecución de la igualdad de género para 2030 es insuficiente, el informe sostiene que es alcanzable. Para ello, es crucial que gobiernos y empresas cambien no solo la distribución de los recursos, sino también la forma de pensar, adoptando un nuevo paradigma económico en el que la equidad de género sea vista como una base fundamental para un crecimiento justo y sostenible.