Skip To Main Content

Estrategias de un onboarding efectivo

Un proceso de onboarding efectivo es fundamental si deseas que tus nuevos empleados sean felices y productivos desde el principio.

Tiempo de lectura 

min

Publicado el 05/08/2024 

La incorporación de empleados es una parte importante del proceso de contratación. Si implementas una estrategia de onboarding efectivo, podrás aclimatar a los nuevos empleados a tu cultura y brindarles los conocimientos y los recursos que necesitan para tener éxito. Es esencial si deseas retener a los empleados, reducir la rotación y maximizar la productividad. Si sigues estas prácticas recomendadas de onboarding, podrás asegurarte de que tus nuevos empleados tengan el comienzo positivo que merecen.

 

Incorporar previamente a los nuevos empleados

 

La preincorporación es el proceso de iniciar la experiencia de onboarding de un empleado antes de su primer día. Puedes entusiasmarlo con su nuevo trabajo y mantenerlo comprometido hasta la fecha de inicio. Este es el momento perfecto para enviarle algún obsequio de la empresa, como una botella de agua o un bloc de notas con tu logotipo, por ejemplo, y alentarlo a que haga todas las preguntas que pueda tener. Además, remítele el cronograma de incorporación por correo electrónico para que sepa qué esperar el primer día.

 

Completa el papeleo lo antes posible

 

Es una buena idea darles a los nuevos empleados una ventaja en las tareas administrativas, como crear una dirección de correo electrónico de la empresa o completar el papeleo de RR. HH., para que su primer día no gire en torno a completar documentos. Algunos ejemplos de papeleo en el que puedes animarlos a trabajar antes de comenzar incluyen:

 

  • Formularios de impuestos
  • Formularios de depósito directo
  • Acuerdos de no competencia o de no divulgación
  • Formularios de reconocimiento del manual del empleado

Si es posible, permite que tus nuevos empleados completen estos formularios electrónicamente para que no tengan que lidiar con la molestia de imprimirlos y completarlos manualmente.

 

Entrega un paquete de bienvenida

 

Si bien los paquetes de bienvenida no son obligatorios, pueden dejar una primera impresión positiva y transmitir que aprecias a tus nuevos empleados. Puedes optar por algo básico, como una taza o una alfombrilla para ratón de la empresa, por ejemplo, o ser creativo y enviar galletas u otros dulces con tu logotipo. Hagas lo que hagas, asegúrate de que tus paquetes de bienvenida reflejen tu cultura única. Envíalos por correo tan pronto como los candidatos acepten sus ofertas.

 

Involucra a los miembros del equipo en el proceso

 

Un onboarding efectivo es un esfuerzo colaborativo, lo que significa que involucra a una variedad de miembros del equipo, no solo a los gerentes de contratación y al departamento de recursos humanos. Asegúrate de que otros empleados, gerentes, supervisores e incluso líderes sénior comprendan el proceso de incorporación y cómo encajarán en él. Los nuevos empleados se sentirán más cómodos y conectados con la empresa en su conjunto.

 

Asignar un compañero

 

Cuando los nuevos empleados se juntan con un compañero con el que se ven regularmente una vez por semana o por mes, tendrán a alguien a quien recurrir para preguntas e inquietudes. Elige compañeros que sean modelos positivos que seguir y que estén entusiasmados por mostrarles a los nuevos empleados cómo funciona todo. Lo ideal es que sean colegas en lugar de gerentes o supervisores directos para que los nuevos empleados se sientan cómodos al preguntarles sobre la cultura y el equipo. Tu programa de compañeros puede ser tan formal o informal como desees.

 

Incorporar la observación del trabajo

 

No hay mejor manera de que los nuevos empleados comprendan cómo funciona tu empresa que observar a distintos empleados. Si trabajan en marketing, por ejemplo, podría tener sentido que pasaran unas horas observando a los representantes de ventas de tu centro de llamadas. Al exponer a los nuevos empleados a diferentes departamentos, estarán mejor preparados para realizar su trabajo. El seguimiento también puede facilitarles conocer a todo tipo de miembros del equipo.

 

Haz que el primer día sea emocionante

 

El primer día de trabajo de un nuevo empleado debe ser divertido e informativo al mismo tiempo. No querrás que pase ocho horas rellenando formularios y asistiendo a clases, pero también desearás asegurarte de que aprenda algo y esté mejor preparado para empezar su trabajo. A continuación, te ofrecemos algunos consejos para garantizar que su primer día sea un éxito.

 

  • Prepara su escritorio u oficina con sus credenciales de identificación, contraseñas, manuales, un mapa del edificio y cualquier otra cosa que les haga la vida más fácil desde el primer día.
  • Organiza un agradable almuerzo con los compañeros de trabajo.
  • Envía un correo electrónico a toda la empresa presentando al nuevo empleado.
  • Regala el primer día.
  • Sé paciente y receptivo.

No dudes en preguntar a los empleados actuales qué les gustó y qué no les gustó de su primer día. Esta información puede brindarte información valiosa sobre cómo planificar el onboarding en un futuro.

 

Comparte tu definición de éxito

 

El éxito varía mucho de una empresa a otra. Por eso, es tu trabajo aclarar qué significa tener un buen desempeño en tu organización. Al hacerlo, utiliza ejemplos concretos de empleados anteriores y sé específico con números o datos, ya que las declaraciones vagas solo confundirán a los nuevos empleados. Si estableces expectativas desde el principio, los nuevos miembros de tu equipo tendrán más probabilidades de lograr el éxito desde el onboarding.

 

Mantente fiel a tu cultura

 

Al final del día, a la mayoría de los empleados les importa algo más que su remuneración. Les gustaría trabajar en una empresa con una gran cultura. Una cultura positiva puede mantenerlos comprometidos, motivados y productivos. Por eso es importante mostrar la cultura de tu empresa durante todo el proceso de onboarding. Comparte la historia de tu organización, así como tu declaración de misión y valores. Resalta lo que la hace única y por qué algunos de tus empleados más antiguos han sido tan leales.

 

Revisa tu proceso de incorporación

 

Tu proceso de onboarding no está escrito en piedra. De hecho, es muy probable que lo cambies de vez en cuando. Busca activamente la opinión de tus empleados actuales a través de encuestas o conversaciones periódicas para saber qué estás haciendo bien y dónde puedes mejorar. Sigue aumentando la efectividad en la forma en que incorporas a tus empleados y no temas renovar por completo tu proceso a medida que tu empresa evolucione con el tiempo.

 

Conclusión

 

Un proceso de onboarding efectivo, como el que hemos detallado anteriormente, es fundamental si deseas que tus nuevos empleados sean felices y productivos desde el principio. Puede hacer que su transición a tu empresa sea lo más fluida posible, al mismo tiempo que aumentan tus tasas de retención y mejoran tus resultados.