Cómo fomentar un entorno de trabajo saludable y productivo

¿cuándo damos nuestra mejor versión?

Hoy en día desde los Dptos de RRHH o de personas y en general desde las empresas tenemos una gran responsabilidad, somos reflejo de una sociedad que nos demanda una serie de necesidades sobre las que debemos enfocarnos y seguir trabajando.  Al mismo tiempo trabajamos por la fidelización de los emplead@s y en ello influyen muchos factores.

Obviamente la retribución es algo muy importante, de hecho, es un higiénico. Una vez que solventamos y equilibramos tanto a nivel interno como externo este factor, los colegas empezamos a valorar otros aspectos, a veces denominados salario emocional.

En materia de diversidad, equidad, igualdad de género, hemos avanzado mucho en los últimos años pero aún tenemos un recorrido importante. Dentro de las empresas debemos seguir trabajando e implementando las medidas que surgen de los planes de igualdad, formando y sensibilizando en esta área, ofreciendo medidas de flexibilidad y conciliación, trabajando en la representación de mujeres y otros colectivos en puestos directivos, analizando y resolviendo la brecha salarial…

Otra preocupación es el bienestar, entendiéndolo desde varios prismas, bienestar físico, emocional, laboral, social, financiero… las empresas debemos ofrecer actividades que traten de ofrecer soluciones a todos los niveles, desde beneficios en acceso a gimnasios, hasta talleres de nutrición, meditación, apoyo psicológico o formacion en cómo gestionar las finanzas personales.

La sostenibilidad es otra de las preocupaciones de muchas personas y como tal, nuestra labor debe orientarse al análisis de los impactos medioambientales ofreciendo soluciones y favorecer todo tipo de medidas relacionadas con la responsabilidad social corporativa.

Hoy en día el emplead@ tiene la decisión última de dar no su mejor versión dentro de su puesto de trabajo y esta decisión es clave en la salud de las empresas.

Contar con colegas satisfechos es un lujo, pero rodearse de personas realmente comprometidas es donde se percibe la diferencia. Y esa diferencia depende del vínculo emocional y la conexión que hemos creado con la empresa, con los compañer@s, y con el propósito. Esta diferencia la perciben también clientes, ya que altos índices de trabajadores/as comprometidos correlaciona con clientes satisfech@s.

A la hora de buscar y fidelizar talento ya no hablamos de contar con profesionales que sepan, puedan y quieran hacer su trabajo, con lo importante que es la actitud en cualquier empleo, sino que, para conseguir ese compromiso, necesitamos que nuestros valores estén alineados con los de la empresa, es decir hablamos de compartir el propósito.

Antes que ser trabajadores, tod@s somos personas, al margen del puesto que cada uno ocupe, tod@s valoramos lo mismo, el cómo nos hacen sentir, el sentirnos querid@s y valorad@s tanto por nuestros compañer@s como por nuestros responsables.

Desde LHH trabajamos el concepto de Psychological Safety (Amy Edmondson), se trata de crear un ambiente en el que se fomente un ambiente de confianza entre colegas y mánager, donde el respeto sea la base, en el que puedas opinar sin temor al rechazo, donde la confianza sea el motor y donde el error no solo está permitido, sino que es una manera de aprendizaje. Cuando estamos en estos entornos, los equipos son capaces de plantear problemas difíciles, la toma de riesgos se vuelve segura, sientes que tus contribuciones son importantes. Las personas se sienten apoyadas, se ayudan, y se valoran las habilidades y diferencias que cada un@ aporta.

Está demostrado que cuando se consiguen estos entornos, las personas damos la mejor versión de nosotr@s mism@s, se generan los más altos niveles de creatividad, rendimiento y productividad y el talento de cada un@ encuentra su máximo apogeo. Y aquí y solo aquí es donde el engagement y el bienestar del emplead@ está asegurado.

Buscamos un espacio donde nos sintamos en equilibrio y correspondidos entre lo que ofrecemos y lo que recibimos, donde se fomente la participación, la comunicación sea transparente y bidireccional, se trabaje el desarrollo, donde el feedback siempre sea un regalo porque ya sea constructivo o no se haga con respeto y con el fin de que tod@s mejoremos y aprendamos, donde haya escucha activa, las ideas y sugerencias sean bienvenidas, haya espacio para las diferencias individuales, donde te pregunten ¿cómo estás? mirándote a los ojos y esperando una verdadera respuesta y en definitiva un entorno donde el enfoque humano sea la máxima.

Sin embargo, en entornos donde no se fomenta este Psychological Safety podemos encontrar niveles de estrés, falta de motivación, descenso en el desempeño, mejoras en materia de clima laboral y rotación.

¿por qué hay personas que trabajan en unos entornos o con unos managers que les hacen brillar y en otros entornos que se apagan o no están motivados?

En LHH RS nuestra misión es que las personas tengan éxito en su puesto de trabajo. Por este motivo y para trabajar en este camino de crear entornos con Psychological Safety, desde LHH RS trabajamos con los managers, para que fomenten estos ambientes, ayuden a las personas de sus equipos a salir de la zona de confort, inviten a participar, generen confianza, admitan sus propios errores, fomenten la escucha activa, formulen preguntas, inspiren y establezcan altos estándares de responsabilidad, porque la exigencia no solo es compatible con generar estos entornos, si no que los buenos lideres son exigentes y saben retar el talento de cada un@ para que las personas puedan aprender, innovar, colaborar y hacer un gran trabajo.